¿Un CDT o un Fondo de Inversión Colectiva – FIC?
Cuando hablamos de inversión el mercado tiene muchas opciones abiertas, pero debemos saber cuál escoger, y eso podemos definirlo de acuerdo con nuestras preferencias y nuestros objetivos. Algunos de los vehículos de inversión más conocidos en el sistema financiero actual son los CDT, aunque también existen otros más avanzados y complejos, con otras características, como los Fondos de Inversión Colectiva.
¿Qué es un CDT?
La sigla CDT significa Certificado de Depósito a Término, un producto financiero con el que se deposita una cantidad de dinero en una entidad bancaria por un tiempo determinado, y a cambio el banco paga un rendimiento fijo o variable, ya sea desde el inicio del CDT o al final del plazo. A ese rendimiento se le conoce como intereses.
En otras palabras, es una herramienta de ahorro e inversión ideal para quienes buscan una forma segura y rentable de obtener ganancias con su dinero.
¿Cómo funciona un CDT?
Para entender cómo funciona un CDT hay que conocer sus características principales:
- Monto inicial:
Es la cantidad de dinero mínima con la que se puede hacer la inversión, varía dependiendo la entidad financiera.
- Plazo:
El dinero se deposita durante un periodo específico, que puede ir desde 30 días hasta varios años.
- Tasa de interés:
Durante el plazo, el dinero genera intereses a una tasa fija (que puede tener condiciones variables) establecida al momento de abrir el CDT.
- Retiro al vencimiento:
Al finalizar el plazo, se puede retirar el dinero inicial, junto con los intereses generados.
Una característica clave de los CDT es que son una inversión predecible, es decir que desde el inicio sabes exactamente cuál será la rentabilidad al finalizar el plazo.
Sin embargo, los CDT son una inversión que solo se puede redimir al vencimiento del término pactado. Si se llegara a necesitar el dinero antes de la fecha pactada, sería necesario acudir al mercado de valores local para tratar de vender el CDT, un negocio en el que se puede perder o ganar parte del capital. dependiendo de las condiciones del mercado. Pero ojo, porque no todos los “emisores” de CDT son aceptados en la Bolsa para negociarse.
Fondos de Inversión Colectiva (FIC): ¿qué son y cómo funcionan?
Ahora, un Fondo de inversión Colectiva, o FIC, es un mecanismo de ahorro e inversión que reúne el dinero de varias personas o clientes (aportes) para invertirlos en un portafolio de activos administrados por expertos. Así se busca obtener rentabilidad para luego dividirla entre todos los inversionistas de manera proporcional a su participación en el fondo, es decir que a mayor haya sido el aporte hecho por el cliente, mayor rentabilidad recibirá.
Los FIC no son administrados por bancos sino por Sociedades Fiduciarias, como Fiduprevisora, por ejemplo, o por Comisionistas de Bolsa y Sociedades Administradoras de Inversión. Cada una ofrece fondos con características particulares y portafolio de activos diferentes, y por eso se recomienda que, antes de elegir uno, se haga una juiciosa evaluación para determinar cuál se ajusta mejor a lo que se está buscando.
Por eso, al momento de seleccionar un FIC, tenga presente: el propósito de su inversión, el plazo en el que quiere lograr su objetivo, la cantidad de recursos que va a invertir, la periodicidad en la que lo va a hacer y el riesgo que está dispuesto a asumir.
¿Cómo funcionan los Fondos de Inversión Colectiva?
Por lo general, lo primero que debe hacer el interesado es elegir la entidad y el FIC en el que desea invertir. La administradora vinculará a la persona y le asignará una cuenta de inversión, si no la tiene. A partir de este momento, el inversionista podrá destinar su dinero a una canasta de recursos que es gestionada por la sociedad administradora.
Esta última invierte el dinero, junto con el de otras personas o empresas, en distintos activos, los cuales pueden ser financieros, como acciones, bonos, Certificado de Depósito a Término (CDT) y Títulos de Deuda Pública (TES), y no financieros, activos como bienes inmuebles.
Dependiendo del portafolio, los FIC se pueden clasificar en:
- Fondos bursátiles, cuyo objetivo es replicar o seguir el comportamiento de un índice del mercado de valores, mediante la constitución de un portafolio integrado por algunos o todos los activos que conforman dicho índice.
- Fondos inmobiliarios, son fondos cerrados cuya política de inversión provee una concentración mínima de activos en bienes inmuebles.
- Fondos de capital privado, también son fondos cerrados y destinan la mayoría de los aportes a la adquisición de activos para diferentes valores inscritos en el Registro Nacional de Valores y Emisores (RNVE).
Ahora, en un FIC cerrado solo se pueden retirar los recursos en los tiempos definidos en el reglamento del fondo. Por el contrario, en un FIC abierto el inversionista puede retirar los recursos en el momento que lo desee (esta es una ventaja en comparación con la inversión en un CDT).
Pero una de las características más llamativas de los Fondos de Inversión Colectiva FIC es que generan intereses diarios que se van sumando al capital inicial haciéndolo crecer, y sobre ese nuevo capital se generan nuevos intereses. Por ejemplo, un capital inicial de 100 pesos generó intereses o rentabilidad por 5 pesos, y esa rentabilidad se suma automáticamente al interés inicial, llevándolo a 105 pesos. Al día siguiente, los intereses o rentabilidad se calcularán sobre los 105 pesos, ya no sobre los 100 pesos iniciales. Eso se conoce como interés compuesto.
En definitiva, los FIC permiten invertir y ahorrar (otra ventaja es que la comisión que cobran, por lo general, la descuentan de los intereses que remunera el fondo y esto permita ver que mis recursos crecen). Ante cualquier inquietud, lo invitamos a consultar a profesionales, como los funcionarios de Fiduprevisora S.A. que están certificados ante las autoridades competentes del país, para asesorarlo en la elección que más le convenga.